Cuando es el viento quien trae las cenizas de tu nombre,
Será la lluvia en forma de besos,
La encargada de borrar tu recuerdo.
Será la noche fría,
La que congele tus miradas en el tiempo,
Apacigüe la memoria,
Y maté el silencio.
No lo sé,
Si será cosas del tiempo,
Del sentir,
O del miedo.
Pero a cada vez que alumbra a lo lejos tu partida,
Me despojo de mi descontento,
Amaño mis sentires,
Y me arrojo al mar de tus tormentos.
No sé quien sea la paz de mis ojos,
Más la pena invisible carcome mis entrañas,
Te extraño,
Mas nunca te he visto.
Te vas,
Mas nunca has venido,
Y yo espero la brisa de tus caricias,
Las cenizas de tu nombre desconocido.
Cadáver I
Cordialmente sírvete a la demencia,
Aun me duele el silencio de tu olvido,
Olvido será la mañana rabiosa,
El silencio penitencial de las estrellas.
Sobre el lienzo calcinado de tu cabeza bífida,
Siento frío aun estando a tres pasos del sol.
Galaxia infernal de la tristeza,
Soles rabiosos bendecidos.
Circo de pulgas,
Siento deseos de prenderte fuego,
De las manos callosas,
La ira pirotécnica y salada.
Varado con el sabor del mal,
Mientras veo el solsticio de la voz media viva,
La risa, la irónica sonrisa,
Tus ojos,
Mi vida.
Jesús Ogaldez/David Rosales
Déjame ser luz de esta tierra
martes, 18 de diciembre de 2012
Déjame tomar tus manos esta noche,
Abrir eso que llamamos vida,
Dejar libre el sentimiento,
.
Que por mas fría que sea la noche,
El confort de tus palabras sera la llama de calor,
Que la inspiración divina,
Se regocijara en todo tu esplendor.
Que sea buena esta noche y las demás,
Que reviva el beso en tu cuello al amanecer,
Que los abrazos sean eternos
Que la bondad de esos instantes perdure.
Siglos sin decaer.
Déjame sentir tu vida,
Ese sentimiento,
Ajeno a todo problema,
Al bendito frió del adviento,
Sea la paz en los ojos del mundo,
Igual a un beso de agradecimiento.
Que sea natividad de los buenos instantes,
Perpetuos y extasiantes,
Esa luz que guié en silencio el buen paso del ser,
Que brille dentro de las horas oscuras.
Que seamos todos luz,
Luz de esta bendita tierra,
Y no solo navidad,
Sea buen momento para abrir el amor.
Abrir eso que llamamos vida,
Dejar libre el sentimiento,
.
Que por mas fría que sea la noche,
El confort de tus palabras sera la llama de calor,
Que la inspiración divina,
Se regocijara en todo tu esplendor.
Que sea buena esta noche y las demás,
Que reviva el beso en tu cuello al amanecer,
Que los abrazos sean eternos
Que la bondad de esos instantes perdure.
Siglos sin decaer.
Déjame sentir tu vida,
Ese sentimiento,
Ajeno a todo problema,
Al bendito frió del adviento,
Sea la paz en los ojos del mundo,
Igual a un beso de agradecimiento.
Que sea natividad de los buenos instantes,
Perpetuos y extasiantes,
Esa luz que guié en silencio el buen paso del ser,
Que brille dentro de las horas oscuras.
Que seamos todos luz,
Luz de esta bendita tierra,
Y no solo navidad,
Sea buen momento para abrir el amor.
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